domingo, marzo 09, 2008

¡El país de las marchas!


Claro que yo como cualquier persona con dos o más dedos de frente entiende que las FARC son terroristas y es obvio que yo como cualquier persona con dos dedos de frente entiende que es necesario que la resistencia civil se pronuncie en contra de cualquier acto de barbarie, pero me siento ofendido por el despliegue mediático de la marcha en contra de las FARC del 4 de febrero de 2008.

Las razones que tengo para plantear este argumento pasan por muchas cosas, pero principalmente por un agrandamiento de analistas políticos y de los periodistas sin mirar con los pies en la tierra lo que ellos osan llamar un acto sin precedentes y la división de la historia de un país en dos. Vengo escuchando lo mismo en multitudinarias marchas que se han hecho en Colombia durante los últimos 20 años o, tal vez, más; mi memoria no llega a tanto, peor la verdad recuerdo una y otra vez múltiples rechazos a los actos de barbarie que han ocurrido en Colombia sistemáticamente durante mucho tiempo. En cada uno se usa una coyuntura y luego volvemos a la pasividad indolente en la que está acostumbrado a vivir el pueblo colombiano, al que generalmente lo mueve la sensiblería y no la sensibilidad hacia la situación. Recordemos marchas y marchas, de diversos tipos. País libre fue uno de los que se atribuyó primero tal logro en contra del secuestro, si mi memoria no me falla fue por aquella época donde se liberó al actual vicepresidente de la república, y qué diremos de la vez que mataron a nuestro comediante Jaime Garzón o la respuesta a la muerte de los 11 diputados, para mostrar eventos muchos más recientes, pero no deja de sorprenderme cómo también nos movilizamos cuando se mató a Pardo Leal, del partido de la UP, ala política de las mismas FARC a las que hoy se le dijo que el país las repudia. Y, tal vez, los ejemplos pueden ser muchos más, pero si miramos todos tienen algo en común, tanto que veamos cuántas personas marcharon con el profesor Moncayo pidiendo acuerdo humanitario, lo que tienen en común es: la coyuntura del momento.

Entonces ahora miremos en contexto lo que fue la marcha de ese día y qué la motivó. De hecho un simple análisis del discurso nos sirve suficientemente para entrar a abordar el problema: “No más mentiras. Libérenlos ya”. A eso le agregamos el día en que se supone que se hizo realidad esa marcha. 4 de febrero de 2008. Y no toca ser magos para saber qué la motivó: Emmanuel, Clara y Consuelo. Un momento donde las FARC mienten, no sólo por no entregar a los 3 secuestrados sino también por no tener al niño en su poder y mentirle sistemáticamente al país. Entonces se la inventó un señor cualquiera con una visión de país sesgada por los medios y fue apoyado por tres o cuatro personas de la misma calaña. Hoy en día son mirados como grandes héroes populares, conocidos como los muchachos del facebook, cuando lo único que pasó fue que les sonó una flauta que le hubiera sonado a cualquiera en ese momento histórico y en esta Colombia, mucho más como se movió todo el proceso. A esta marcha se le atribuye un triunfo que no es de los que la iniciaron y mucho menos del facebook. Es que sencillamente la vida en Colombia es así de mediática. Miremos el caso. Usted tiene una cuenta en facebook y le llega una invitación en repudio a las FARC, la mayoría de personas aceptan todo lo que les llega a facebook, aplicaciones que nunca usan e invitaciones de las que nunca forman parte, y la cosa es por puro pundonor… ¿cómo negarle a alguien entrar al grupo de su bar, a la publicación de su libro, a la lectura de poesía del viernes, apoyar su nueva empresa, pero más aún, cómo negarse a decir que no se quieren más secuestros y una Colombia en paz? Entonces el grupo fue creciendo mesuradamente, como crecen muchos grupos en facebook, es más podría aventurarme a decir que tiene más seguidores El Chavo del 8 en facebook que opositores las FARC, lo que no entiendo es cómo un grupo con 10.000 integrantes deciden los medios que es noticia y dan una posible marcha como una noticia y la vuelven realidad. Yo estoy seguro que sin esa ayuda de los medios ese grupo no hubiera llegado a más de 200.000 usuarios y mucho menos esos 200.000 hubieran acudido a la cita que puso un cualquiera, tal vez, no hubiera pasado de ser una marcha más por la séptima de aquellas que hay todas las semanas pidiendo algo, reclamando por algo. Pero no, como se masifico por los medios los empleadores dieron permisos para reclamar en contra de las FARC, la gente se sintió exhortada a tener que marchar puesto que el que no marchaba en ese momento no era colombiano y muy seguramente sería tildado de chavista, farco, eleno o del polo democrático que, según algunos, estaba torpedeando la marcha. Menos mal yo no marché, peor sí me hubiera gustado estar acompañando a la gente directamente afectada en este problema como son los familiares de los secuestrados, peor a ningún medio le pareció relevante decir que ellos no marcharían sino que se concentrarían en la iglesia del Voto Nacional para pedir por el fin de la guerra, el acuerdo humanitario, el no cerco militar alrededor de los secuestrados y un sin fin de cosas más, que se dijeron por ahí perdidas como si fueran una noticia de entretenimiento y de las que yo me vine a enterar por un canal de cable centro que no ve nadie. ¡Cómo es la vida! Todos decían estar a favor de los secuestrados y marchando por ellos, pero sus familiares estaban solos porque nadie volteó a mirarlos. Y tampoco se le dio relevancia a la amenaza de muerte a Carlos Gaviria, puesto que él y su partido político estaban desentonando en la protesta que cuatro pendejos se inventaron y que salieron en todos los medios a recriminar porque su grandiosa idea estaba siendo desvirtuada. Eso sí, dijeron que la liberación de los nuevos cuatro secuestrados era un logro de la marcha, cuando se había anunciado casi a la par con la liberación de Clara y Rocío, o sea que la marcha sí tiene logros, pero a Piedad debemos buscar que la maten… qué buena lógica. ¡Qué democracia la que tenemos! Vamos en contra de las barbaries, pero si las barbaries son contra alguien que se supone opositor de mi política y lee el país diferente, él debe recibir el trato que muchos creen que deben recibir los bandoleros. Un país con doble moral.

Claro si el PDA se concentra está mal pues politizan la marcha, pero si el gobierno apoya la marcha, entonces no se politiza, por lo mismo yo digo y sostengo con vehemencia que esta marcha más que bien lo que hizo fue seguir polarizando el país. Cosa que parecía imposible. Como dijo alguien por ahí en cualquier parte, seguro no se logre nada con las FARC en esto, pero muy seguramente la popularidad del presidente subirá otros dos puntos. Yo a ratos me pregunto si el presidente tiene esos puntos de rating o de share, sería hasta bueno saberlo.

Ahora hemos visto como crece el repudio del facebook por todo lo que no parezca, piden la muerte de Piedad Córdoba, la muerte de Chávez, exhortan a la felicidad por la muerte de los cabecillas de la guerrilla (¿tanto para sentir felicidad por el asesinato de un tipo al que luego le es cortada una mano como trofeo de ser él el héroe que acabó con tal infame?)… recuerdo un día donde escuché a alguien decir ante una eventual muerte de Carlos Castaño: “se murió el único que defiende este país”. De la misma manera como se siente alegría por la muerte de Raúl Reyes alguien sintió gran dolor por la muerte de Castaño. Por eso, seguramente, la marcha del 6 de marzo fue catalogada como una marcha en pro de las FARC y ahora se prepara la respuesta con una marcha en rechazo a Chávez… Hoy en día es el facebook el vocero de todo lo que parece que va a ocurrir en este país, pronto seremos el país de las marchas y habremos cumplido nuestra misión en la vida, rechazar todo lo que al juicio de alguno sea nocivo y sentir que con eso se puede dormir en paz con el papel realizado…

Foto: Juan Manuel Restrepo.